En medio de la crisis migratoria que está sucediendo en el norte del país por los masivos ingresos de extranjeros indocumentados, en el lugar han surgido organizaciones criminales que se aprovechan de esta situación con el objetivo de introducir droga, utilizando a estas personas, en la región de Tarapacá.
Modus operandi
En la extensa frontera entre #Chile y #Bolivia, la que se extiende por 300 kilómetros, muchos extranjeros que se encuentran perdidos en el lugar, son abordados por personas que les ofrecen ayuda de orientación a cambio de ingresar droga al país.
Debido a la desesperación, los inmigrantes aceptan y se embarcan en una caminata hasta llegar a la avenida principal de #Colchane, lugar donde se encuentran los transportes clandestinos con destino a #Iquique.
Tras un largo viaje de cuatro horas sin medidas sanitarias y con el bus repleto de personas indocumentadas, finalmente llegan a la ciudad a la calle Esmeralda, lugar donde nuevamente se encuentran furgonetas y taxis que transportan a los inmigrantes hasta el paso fronterizo de Loa.
Al llegar al Complejo Fronterizo, muchos inmigrantes se autodenuncian ante las autoridades con el objetivo de tramitar las documentaciones chilenas. Sin embargo, las personas que transportan droga en distintas partes de su cuerpo, evaden la fiscalización movilizándose por la playa que colinda con la carretera hasta pasar la fiscalización de aduana.
En el lugar, las autoridades los sorprenden, deteniéndolos y revisando sus pertenencias, donde efectivamente se encuentran grandes cantidades de droga en las maletas, bolsos e incluso debajo de las zapatillas, confirmando así la presencia de esta mafia del tráfico de drogas en el norte del país.