Defensoría de Atacama realizó diálogo participativo con internas privadas de libertad

En la actividad, se dio a conocer el convenio de cooperación en la incorporación de la perspectiva género suscrito entre la Defensoría, la Fiscalía y el Poder Judicial.

Como es costumbre, en marzo la Defensoría Regional de Atacama conmemora el “Día Internacional de la Mujer” con alguna actividad que involucre a las mujeres privadas de libertad en la región. Esta vez, el encuentro se realizó en el Centro de Cumplimiento Penitenciario (CCP) de Copiapó.

Las 50 mujeres privadas de libertad en el recinto fueron saludadas por el Defensor Regional, Raúl Palma Olivares, y por la jefa de Estudios, Violeta Villalobos Utreras, quienes llegaron al penal acompañados por la presidenta de la Corte de Apelaciones de Copiapó, ministra Marcela Araya Novoa, y el director regional de Gendarmería, coronel Víctor Vera Bustos.

Palma Olivares agradeció la presencia de la ministra Araya, a quien invitó a este encuentro en el marco del convenio de cooperación vigente entre la Defensoría, la Fiscalía y el Poder Judicial, en cuyo contexto las instituciones se comprometieron a promover, proteger y respetar los derechos y la igualdad de las mujeres en el sistema penal, además de promover la perspectiva de género en su rol institucional.

“Para nosotros la labor de defensa con perspectiva de género de las mujeres privadas de libertad es prioritaria, porque no podemos permitir que se perpetúe la violencia contra la mujer en los recintos penitenciarios, que tienen un diseño pensado para los varones, con una escasa oferta de capacitaciones y donde las mujeres sufren con mayor crudeza la soledad, la distancia con sus redes familiares, la falta de visitas e incluso la ausencia de programas de salud enfocados en ustedes”, afirmó el jefe regional de la defensa pública.

La ministra Araya, en tanto, celebró la actividad, agradeció la invitación del Defensor Regional y relevó su interés en el tema carcelario. “Resulta relevante la consideración hacia las mujeres, en especial las privadas de libertad, que muchas veces son olvidadas, silenciadas o invisibilizadas. Me pareció que la acogida de ellas fue buena y noté que las sentidas palabras del Defensor Regional fueron bien recibidas, más aún en esta fecha tan significativa, donde de se conmemora el mes de la mujer y la reivindicación de nuestros derechos, especialmente de aquellos grupos vulnerables como las mujeres privadas de libertad».

El director regional de Gendarmería comentó luego que la actividad buscó “permitir a nuestras internas conmemorar su día, generando esparcimiento y recreación dentro de su reclusión. El trabajo conjunto entre Gendarmería, la Defensoría y la Corte de Apelaciones se remonta hace muchos años y existe una buena relación, porque estamos conjuntamente viendo los temas prioritarios de la población penal y los derechos de los internos e internas”, dijo.

DIFUSIÓN DE DERECHOS


La actividad se dividió en dos bloques. En el primero participaron 32 mujeres condenadas, mientras que en el segundo intervinieron 18 imputadas. El Defensor Regional explicó a ambos grupos que la actividad conmemorativa no pudo realizarse el pasado 8 de marzo, porque el centro penitenciario se encontraba en cuarentena preventiva.

“Estamos conmemorando la lucha de la mujer por sus derechos, por su legítima participación en igualdad en la sociedad y es por eso hemos querido estar con ustedes, para recordar que la dignidad de la mujer es un valor que está presente en el trabajo diario de nuestra institución”, sostuvo Palma Olivares, quien añadió que, a partir de reconocer la importancia de la mujer en la sociedad, “debemos relevar la equidad de género en todos los ámbitos, reforzando de esta manera el compromiso que como defensores públicos tenemos con ustedes, defendiendo su dignidad y sus derechos como privadas de libertad”, aseguró.

La jefa de Estudios, en tanto, recalcó a las internas que “el hecho de estar privadas de libertad no significa que pierdan otros derechos. Por el contrario, sus derechos humanos se ven reforzados y el Estado de Chile tiene el deber de protegerlas, cuidarlas y permitir que puedan ejercer sus derechos. Tienen derecho a la salud, a la integridad física y psíquica, a ejercer su rol de madres y parejas, a vivir en un ambiente sano y saludable. Todos los derechos fundamentales les siguen perteneciendo”, indicó.

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